Ideal para: comidas completas, meal prep, recetas de otoño/invierno, acompañamiento para carnes blancas.
Raciones: 2–3 personas.
Tiempo total: 35–40 minutos.
Una ensalada templada, muy nutritiva y llena de color. La calabaza aporta dulzor y suavidad; la quinoa, proteína vegetal; y la granada, frescor y acidez equilibrada. Es una receta que funciona muy bien para llevar al trabajo porque se conserva perfecta.
Ingredientes
- Sal y pimienta.
- 300 g de calabaza en cubos.
- 1 cebolla morada en láminas.
- 200 g de quinoa.
- 1 granada.
- 20 ml de zumo de limón.
- Semillas al gusto (chia, amapola, sésamo…).
- Menta fresca.
- 3–4 cucharadas de aceite de oliva.
Preparación
1. Asar la calabaza
Precalienta el horno a 220 ºC. Mezcla la calabaza y la cebolla con aceite y sal. Asa 20 minutos, hasta que esté tierna pero firme.
2. Cocer la quinoa
Lava bien la quinoa para eliminar el sabor amargo. Cuece en agua con sal 10–15 minutos. Escurre por completo.
3. Mezclar
En un bol grande, junta la quinoa con la calabaza, la cebolla, las semillas, los granos de granada y la menta picada.
4. Aliñar
Mezcla aceite, limón, sal y pimienta. Añádelo justo antes de servir.
Otros consejos de preparación
- Añadir queso feta o queso fresco suaviza el sabor y aporta cremosidad.
- Para meal prep: guarda el aliño aparte y mézclalo en el momento de comer.
- Queda espectacular si lo sirves templado y no completamente frío.



